De los quince niños que tengo en clase, dos de ellos son marroquíes, uno peruano, una niña polaca y otra rumana.
El otro día estaba explicando -miento, tratando de explicar- todo eso del sujeto y el verbo en una oración. Durante mi explicación, y sin ningún preámbulo, uno de ellos me pregunta:
- Profe, si se juntan una española y uno de Marruecos, ¿qué sale?
- Pero bueno, ¿tú me estás escuchando? ¿cómo que qué sale? ¿qué quieres decir?
- Pues eso, que qué sale. Que si tienen hijos, ¿los hijos salen marroquís o españoles?
- Eso no importa. No tiene ninguna importancia. Lo verdaderamente importante es que esa mujer española y ese hombre marroquí se quieran.
- Ya, profe. Pero si es una niña, ¿llevará pañuelo en la cabeza o no?
Si el lector ocasional cree que esto es ficción, le invito a mi clase. Que lo vea en directo. Que vea cómo las niñas van a clase de Educación Física con el pañuelo puesto.
Seguiremos informando.
5 de octubre de 2007
Tengo que estar preparado para todo
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5 comentarios:
Y si no estás preparado, no te preocupes demasiado, ese todo te prepará....
Es una de las maravillas, enseñas y al mismo tiempo que aprendes
Me lo creo a pies juntillas. Mi hermana me cuenta anécdotas similares un día sí y otro también.
Y de acuerdo con anónima. Estás metido en un flujo de aprendizajes-enseñanzas de lo más enriquecedor.
Eso.
Es que he llegado tarde coño, lo siento.
Yo sí que llego tarde...
La verdad es que tienes que estar enfrentándote todos los días a paradojas, replanteamientos de temas, conflictos internos, etc. Pero tienes que aprender un huevo. Qué envidia...
Estás preparado para todo, no te preocupes. Esto es mucho más enriquecedor que estar 8 horas al día delante del ordenador, por mucho que te guste...
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