11 de diciembre de 2007

Los de sexto

Bien. No quería -creo que ni quiero aún- hablar, o sea, escribir, de los de sexto. No me ha apetecido desde que comencé mi segunda etapa del blog (por cierto, segunda y definitiva). Los de sexto es el nombre que reciben unos individuos e individuas en la única clase de 6º de Primaria en nuestro cole. Hoy no os voy a contar por qué reciben, merecidamente, ese nombre por parte de nosotros, los maestros. Que también tenemos derecho a hablar los maestros.

(Como un día os cuente, por ejemplo, la necesidad física que tengo al terminar las clases de decir en alto: gilipollas, es que eres un gi li po llas. Mecagoen tó lo que semenea, etc, etc. Lo siento, pero lo echo de menos. En mi curro, que está muy bien, no te dejan decir palabrotas.)

Bueno, a lo que voy. El día que "te toca" con los de sexto vas apañado. Primero, lo saben todos tus compañeros, porque ya te has encargado tú de repetirlo lamentándote: Buenooo, me toca con los de sexto.

Pues los miércoles tengo dos horas. ¿No querías té?. Sólo les doy el Inglés, thanks God. Y los miércoles, como la sesión es de dos horas, siempre les traigo una canción. Una canción de verdad, que elijo cuidadosamente, que lo hago, y os lo digo de verdad, con todo el cariño que le tengo a mi profesión. ¡Y no me hacen ni puto casooooo!

Por fin, el otro día, volviendo del recreo, y entre un ruido de fondoooooo de mil pares de coj...

(Encima, es que aquí tampoco debería. Alba, una alumna mía, me dice que lee siempre mi diario).

Uno de los de sexto:
-Profe, ¿sabes que el otro día salió en la tele el de la canción?
-¿Como el de la canción? No te entiendo.
- Sí, profe, el tío ese que le mataron. El que se imaginaba que no había guerras ni religiones.

¡Toma!. Punto para el menda. ¿Qué pasa? No, no están aprendiendo una mierda de inglés. Y no tengo miedo de que nadie me despida. Así que hago lo que me sale de.... O sea, lo que puedo.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Sé que aquí va de lujo un refrán, pero no estoy muy segura de que sea este: Siembra, que algo queda.

En mi muuuuy modesta opinión eso es lo bueno, que les quede algo, sea lo que sea, luego la propia madurez les hará hilar esos "algos" hasta convertir el collage en un maravilloso ser humano.

Anónimo dijo...

Pues haces lo que te sale de... del alma. Que cuando siembras, muchas semillas se pierden, se las lleva el viento, se las comen los pájaros, se pudren en el lvido... Pero alguna, algunas germinan. Y eso es lo que cuenta, que alguna germine, ya que todas no puede ser, nunca lo ha sido y nunca lo será.

¡ Ánimo, Ángel !

(Chedor)

Kim dijo...

A mi me hubiera encantado que algún profesor me hubiera puesto canciones como esa.