25 de febrero de 2012

Una reflexión muy seria

Hoy, como es sábado, os voy a hablar de otras cosas. Cosas que no sean del cole.

Algunas madres me han contado que en lugar de hacer los deberes, quedan en el ciber y empiezan a chatear en el twitter. Unos en la planta de arriba y otras en la de abajo. Y uno se pregunta... ¿por qué? Ellos saben que una de las reglas de seguridad (que no la única), es chatear sólo con quien conoces. Pero, si además, estás chateando con alguien que está a pocos metros de ti... ¿no sería mejor hablar directamente? ¿no sería mejor disfrutar ahora, que las tardes son más largas, de un ratito de conversación, sea antes o después de hacer los deberes?


El otro día, algunas de mis alumnas, a las que les gusta revolotear a mi alrededor mientras estoy sentado en el banco del patio:

(Un momento, una cosa: A mí me encanta que revoloteen a mi alrededor. Es lo mejor del recreo del comedor.)


- Con lo bonito que es hablar... no entiendo por qué perdéis el tiempo en el twitter.

(Me miran inmediatamente. He captado rápidamente su atención. Y ellas se han dado cuenta rápidamente de que alguna madre "sa chivao".)

- Ya, profe, pero...

- ¿Pero qué?

- Pues que... que el twitter también mola.

- Ya, lo que pasa es otra cosa. Lo que pasa es que hay cosas que no os atrevéis a decir directamente, porque os da vergüenza, y por el twitter no, ¿a que sí?

- Sí, claro. Pero si yo no lo uso... casi.

(ahora interviene mi otra alumna):

- Pues Pilar (nombre ficticio) tiene facebook, y twitter, y además el otro día estuvo hablando con nosequién en el mundogaturro. 

- Yo sólo digo que hablar mola mucho también. Y que ahora ya se puede estar en la plaza un ratito, antes de irse a casa, porque no hace tanto frío. Yo odio el facebook, ya lo sabéis. Y el twitter ese también. Y eso que nosotros estamos en internet con nuestro periódico antes de que el twitter ese se hiciera famoso. Una cosa es nuestro periódico y otra muy distinta el facebook.

(Mi escucho a mí mismo, yo, que, además, inventé un facebook para niños antes de que el Zuckerberg ese tomase su primer biberón. Y no bromeo.)


Por cierto, hay una iniciativa preciosa para hacer que los alumnos aprendan biografías de los grandes personajes de la historia. Consiste en imaginar cómo hubiera sido su página en facebook.

Me enteré el otro día, por el twitter.





3 comentarios:

Leticia dijo...

Con niños de esa edad, estoy completamente de acuerdo contigo. Y con gente que tienes a mano, es de tontos comunicarse a través de las redes sociales, pero te confesaré que a mi (que las utilizo con "prudencia"), me han dado muchas satisfacciones. Compruébalo...
http://mipatatacorazon.com/2012/01/13/el-mundo-en-mis-manos/

Alba Stark dijo...

Al menos eso es mejor que estar con sus amigos por la calle y hablar con otros por la blackberry.

Mújol dijo...

Como me gusta que mis ex-alumnos me escriban...