25 de febrero de 2008

Infinito

"Yo soy un hombre sincero,
sin cero y sin infinito
."
J. Sabina

Ya puedes explicar como quieras -un buen reto para futuros maestros- el concepto de infinito, que no lograrás hacerte entender (como lo de ponerse en fila, pero peor). La razón por la que resulta algo muy difícil de explicar es la misma por la que resulta muy difícil de entender: es el concepto abstracto más abstracto que existe (siempre que admitamos que el infinito existe).

Todavía recuerdo a mi profesor de Matemáticas, a la edad de mis alumnos, hablando de ello (no sé cuántas veces sale en este blog la expresión "a la edad de mis alumnos", pero muchas, seguro). Recuerdo que, cuando teníamos oportunidad, le pedíamos que volviera a hablarnos de "lo del infinito". Me encantaba que me hablaran de aquello, y no me importaba no entenderlo: me resultaba fascinante de todas formas. Es más, si lo pienso, creo que me resultaba -y me resulta- fascinante precisamente porque eso no hay dios que lo entienda. Algo puede ser muy, muy grande, pero infinito...

Nosotros usábamos la expresión incluso para responder a un insulto: "Tú eres el más tonto del mundo", "Pues tú, infinito". Podíamos estar repitiendo una misma palabra muchas veces. Pero muchas. (Cuando os hablé de los curiosos procesos mentales que se ponen en marcha a esta edad, me olvidé deciros que un día, a la edad de mis alumnos, estuve casi una hora repitiendo sin parar la palabra "calafatear". Desde Tobarra hasta Murcia. Y mis padres soportándolo.). Pero, aunque repitiéramos muchas veces algo, había una fórmula mágica, tipo Harry Potter, para resolverlo todo. Infinito. ¿Cuántos millones de euros te gustaría tener? Infinito. Un término total, la palabra definitiva. A Ariel Rot le gusta la palabra "gratis" (que no está nada mal, la verdad). A mí me gusta infinito.

¿Cómo es el universo? Infinito.
¿Cuántos años tardaremos en saberlo? Infinito.

_________________
¿Cuántos lectores te gustaría tener?

11 comentarios:

Anónimo dijo...

Tu si que eres infinito!!

Mújol dijo...

Esther, ¿me lees? Perdonad los demás... es mi prima, desde Torremolinos.
¿Has visto la ceremonia de los Oscars? ¿Sabes quién hacía de intérprete? (De intérprete, no de traductor)

Sí, nuestro amigo Fernando. Una voz inconfundible. ¿Qué será de él? Mañana hablo de su trabajo.

con Ka dijo...

Pues a mí, a la edad de tus alumnos, 'lo del infinito' me provocaba cierta inquietud. Recuerdo haber soñado que el infinito era un pozo al que caían números y más números, y saber que no se acababa nunca me daba vértigo.

Claro que también tenía mucha utilidad a la hora de 'rebotar' insultos...
;)

Anónimo dijo...

Me acuerdo de lo que me costó aprender a hacer Límites en BUP, con lo del infinito, era horrible: fueron la razón de que estudiara letras, aunque a lo mejor debería darles las gracias, así descubrí
la Literatura y el Arte.

Rodros dijo...

Tengo el recuerdo de pensar que los mecheros eran infinitos. Yo era muy pequeño.
Ejemplo? Muy fácil, diles que se pongan a contar de uno en uno y que te digan cuanto tiempo estarán contando hasta acabar.
A además no sólo hay un tipo de infinito!! Hay 2!! Infinito numerable (aleph sub cero) e innumerable (aleph sub uno). Una de las grandes preguntas de las matématicas es saber cuántos números hay entre aleph sub cero y aleph sub uno, aunque la mayoría de las teorías apunta a que sólo hay uno :)

Anónimo dijo...

Claro que te leo. Y claro que es Fernando, pensé que lo sabías, lleva años en los oscars. Qué caña, verdad?. Sí que se de él. Te contaré en un correo. Te adelanto que, en diciembre, ha pasado por la misma situación que yo tan solo tres días antes. Estuvimos atentos uno al otro. Sí, voz inconfundible, persona inconfundible también.

Unknown dijo...

Y si no recuerdo mal... me parece que en términos matemáticos el infinito es cuantificable, o sea que el infinito no es infinito... ¡Vaya lío, no?

Irreverens dijo...

Rodros, flipo contigo.
:)

A mí lo del infinito me cuesta tanto imaginármelo como la "nada".

Yo es que soy de letras. Se nota, ¿verdad?

Kim dijo...

Comparto la reflexión (porque era una reflexión, verdad?) de Irre. La nada es lo mismo que el infinito.

Y comparto el gusto por la palabra infinito, y... (iba a decir por su significado pero mejor lo dejo).

y por Ariel claro que sí. Y por la canción de Bunbury. Y por la palabra gratis.

Y por ti abuelo, y por ti.
Bon voyage, para los dos, claro.

Anónimo dijo...

A mí, a la edad de tus alumnos, mi padre me puso entre dos espejos, uno enfrente del otro, para explicarme el concepto de infinito. Al final el túnel de espejos termina por torcerse hacia un lado, pero para hacerse una idea fue un buen ejemplo.

Alba Stark dijo...

¿qué cuántos lectores me gustaría que tuvieran mis blogs?

Pues...




...Infinitos...